La producción de energía de los paneles solares bifaciales no sólo se obtiene de la absorción de la luz solar directa en la cara frontal, sino también de la luz reflejada en la cara posterior.

Tradicionalmente para determinar la generación total de energía de un panel bifacial, se suma ambas producciones delantera y posterior, pero la dificultad estriba en calcular esa producción de la parte posterior, por lo que se suele usar la “ganancia bifacial”, que es la fracción de la energía producida por la cara frontal del módulo.

Como la luz reflejada en la parte posterior del módulo se comporta de forma diferente a la que llega a la parte delantera, los módulos bifaciales deben entenderse en términos de "relación bifacial" (la relación entre la irradiación de la parte trasera y la de la parte delantera) y de "bifacialidad del módulo" (la relación entre la eficiencia de conversión de energía de la parte delantera y la trasera).

La irradiación de la parte trasera también depende de factores como la luz solar reflejada por el suelo y la luz solar difundida por la atmósfera.

Para entender el nivel de irradiación reflejado por una superficie sólida, se debe tener en cuenta el albedo, que es el coeficiente de reflexión de la superficie.

Otros factores que intervienen son las sombras, la altura de los módulos y o el pitch (distancia entre las distintas filas de módulo).

En los monofaciales, la superficie posterior de la célula monofacial tiene una superficie posterior de aluminio que bloquea la absorción de la luz en la parte posterior.

Por el contrario, las células bifaciales mediante un proceso de texturización alcalina, consiguen la misma estructura de captación de luz en ambas caras. 

Los distintos tipos de células y tecnologías tienen diferentes índices de bifacialidad, relación entre la eficiencia de la parte delantera y la trasera. Las tecnologías de células de tipo N, como HJT y TOPCon, tienen una mayor bifacialidad en comparación con PERC. 

En los paneles bifaciales, la cara posterior requiere un material translúcido que permita el paso de la luz solar. Muchas veces se emplea una estructura de doble vidrio o cristal (glass-glass) para conseguir esto.

Los fabricantes tienden a preferir los paneles de vidrio tanto en la parte delantera como en la trasera de un módulo bifacial porque estos diseños tienden a transmitir mejor la luz y son más resistentes a las inclemencias del tiempo, a la permeabilidad de la humedad, a la corrosión y a una capacidad de carga mecánica más excelente.