El mantenimiento de las estructuras para paneles solares suele quedar en muchas ocasiones relegado ante el mantenimiento de otros elementos de la instalación como los módulos fotovoltaicos, los inversores solares o las baterías solares pero resulta también importante.
El mantenimiento de las estructuras dependerá del diseño que se haya usado y el montaje realizado, así como los materiales empleados. En un principio la estructura debería estar protegida superficialmente contra la acción de los agentes ambientales.
Cómo realizar el mantenimiento de estructuras de paneles solares
Es recomendable realizar una serie de comprobaciones al menos una vez al año para asegurarnos que la estructura está en perfectas condiciones. Para ello se deben seguir las siguientes recomendaciones:
Realizar una inspección visual de toda la estructura en busca de corrosión, deterioro o golpes.
Comprobar las fijaciones a la superficie, ya sea el suelo, tejado u otros lugares donde la estructura está anclada, asegurando que no hay holgura y se mantiene bien fijada.
Chequear lugares donde hayan tornillos para comprobar que estén bien apretados.
Comprobar que la sujeción de los módulos a la estructura no haya ganado holgura con el tiempo y estén bien fijados.
Asegurar que el cableado de los módulos sea correcto y esté en su lugar.
Comprobar si las dilataciones provocadas por los cambios de temperatura no ha provocado daños en la estructura o las fijaciones.
Tras fuertes eventos climatológicos, tal como grandes nevadas, granizo, fuertes vientos o similares, comprobar las partes expuestas y si han sufrido daños.
En el caso de disponer de seguidor solar comprobar periódicamente su correcto funcionamiento y el estado de todos sus componentes.
Mantenimiento de estructuras fotovoltaicas